Día Mundial del Retrete, cuestión de salud pública

Hoy, aunque pareciera broma, se celebra el Día Mundial del Retrete, llamado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Día Mundial del Saneamiento. El cual –como bien escribía antes- suena algo hilarante, pero lo cierto es que no lo es y es de suma importancia. Pues aunque en los países occidentales toda la población tiene acceso a un sanitario, el 37 por ciento de los humanos del mundo, carece de este servicio o por lo menos de uno adecuado, lo que ha llevado a Naciones Unidad a publicar en su agenda éste día y mostrar su trascendencia y gran importancia para la salud pública.

"Cada año más de 800 mil niños menores de 5 años mueren innecesariamente a causa de la diarrea (más de un niño cada minuto). Innumerables niños caen gravemente enfermos y en muchas ocasiones les quedan secuelas a largo plazo que afectan a su salud y su desarrollo. Un saneamiento y una higiene deficientes son la principal causa de ello. En todo el mundo, unos dos mil 500 millones de personas no gozan de los beneficios de un saneamiento adecuado” explica Ban Ki-moon, Secretario General de Naciones Unidas.

De hecho, por ejemplo en India, casi la mitad de los mil 200 millones de habitantes no tienen acceso a un retrete. Para hacernos una idea, según explican desde la ONU, hay más gente que dispone de un teléfono móvil que de un inodoro. Y no es un problema nimio, ni mucho menos. Según los datos manejados por la organización, el 80 por ciento de las enfermedades en los países en desarrollo están provocadas por un acceso poco seguro al agua y por un saneamiento inadecuado.

“Más de mil millones de personas defecan al aire libre. Echemos abajo los tabúes y hagamos del saneamiento para todos una prioridad de desarrollo mundial" ha explicado igualmente Ban Ki-moon que espera terminar con la “defecación al aire libre” en 2025. A este respecto ha señalado que todavía queda mucho trabajo que realizar de cara a alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio para 2015 de reducir a la mitad la proporción de personas sin servicios de saneamiento adecuado.