C4 cazará autos contaminantes; Profepa revisará todos los verificentros

Desde hoy, las cámaras de videovigilancia de la Ciudad de México cazarán en tiempo real a los vehículos contaminantes.

De acuerdo con el director del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C4) de la capital del país, Idris Rodríguez, el personal a su cargo detectará a los automotores que echen humo y dará aviso al Control de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina “para que se haga la detención y se proceda”.

Con la entrada en vigor de la Norma Emergente de Verificación Vehicular todos los vehículos que busquen hologramas 00 y 0 para circular todos los días deberán pasar una prueba OBD II, a través de la computadora interna del auto, por lo que la red de cámaras también vigilará que no haya casos de corrupción en los verificentros.

Además, dijo Rodríguez, el C4 recibirá denuncias ciudadanas en los números 066 y 089 sobre anomalías en verificentros o contra vehículos contaminantes.

En tanto, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) comenzará hoy la supervisión de todos los verificentros que están en la Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo, Puebla, Morelos y Tlaxcala, entidades federativas que integran la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe).

Echan ojo a los escapes; nueva verificación vehicular

Para evitar corrupción al otorgar hologramas, autoridades monitorearán en tiempo real el interior de los verificentros con cámaras conectadas al C4.

Los nuevos procesos de verificación vehicular serán monitoreados en tiempo real a través de las cámaras de vigilancia del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C4) para evitar actos de corrupción durante su ejecución.

Con la entrada en vigor de la Norma Emergente de Verificación Vehicular, el Gobierno de la Ciudad de México aseguró que se enfocarán en el interior de los 67 verificentros donde se aplicarán las pruebas de OBD y de dinamómetro para el otorgamiento de los hologramas 00, 0, 1 y 2.

“En el área de despacho hay posiciones destinadas a personal de la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema) que están verificando la situación de cada uno de los verificentros, aparte del trabajo que tienen en el Centro de Monitoreo de la secretaría.

“Es un tema de coordinación en la información: cuando haya necesidad de que intervenga alguna autoridad por algo que esté ocurriendo, se dará aviso a la Contraloría General o, en su caso, a la Secretaría de Seguridad Pública en el caso de algún vehículo que sea detectado como contaminante, se hará la detención y se procederá”, dijo Idris Rodríguez, director del C4.

En conferencia conjunta con la titular de la Sedema, Tanya Müller, el contralor general, Eduardo Rovelo, y el subsecretario de Control de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Pública, Fernando Martínez, el funcionario agregó que el centro de monitoreo también recibirá denuncias ciudadanas.

“Estaremos recibiendo llamadas a través del 066 y 089, de los botones de auxilio, de alguna denuncia que la gente pudiera hacer respecto a temas de actos indebidos en algún verificentro o de vehículos contaminantes”, indicó.

Explicó que en el C4 se revisarán en tiempo real las imágenes que lleguen de las cámaras que fueron instaladas en 62 de los 67 Centros de Verificación Vehicular que hay en la ciudad, en las patrullas medioambientales a cargo de la Sedema y de la red de cámaras de la ciudad.

Müller destacó que el personal de la dependencia que se sumó al C4 fue capacitado para coadyuvar en el monitoreo en tiempo de real de los verificentros y permitir una respuesta inmediata en cualquier situación irregular.

En el proceso de vigilancia, además de apuntar a evitar actos de corrupción cometidos por los operadores de los verificentros, también se buscará que el software con el que se apliquen las pruebas, tanto de OBD como las dinámicas, no sea alterado.

“Estaremos en tiempo real, llevaremos auditorías cibernéticas al sistema, estaremos verificando que todo este sistema innovador que no se tiene en ninguna otra entidad sea escrupulosamente verificado y cumpla con los requisitos y expectativas que se establecen”, señaló el contralor.

Un segundo candado de seguridad estará en los hologramas que reciban los automovilistas de acuerdo con las mediciones obtenidas durante la verificación, los cuales fueron fabricados con elementos de seguridad reforzados para evita su falsificación.

“Los hologramas tienen papel de alta seguridad, una tinta multifuncional, microtexto, módulo de microimpresión, módulo de doble validación, fondo de modulación en relieve y código QR, entre otros elementos”, detalló Müller.

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) inicia hoy las inspecciones a 447 verificentros (338 para transporte particular y 109 para transporte público federal) en las seis entidades de la Megalópolis (Ciudad de México, Edomex, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala).

De julio a diciembre, la dependencia federal se enfocará en revisar el correcto funcionamiento de los instrumentos que se utilizan en el proceso de verificación de las emisiones de los vehículos, por lo que no podrá sancionar a particulares.

También, instalará equipos de detección remota sobre las vialidades para prevenir la circulación de vehículos ostensiblemente contaminantes, aunque sin afectar los patrones de tránsito vial.

El subprocurador de Inspección Industrial, Arturo Rodríguez Abitia, detalló que se desplegarán 64 inspectores, quienes podrán imponer sanciones que van de 50 a 50 mil salarios mínimos (alrededor de 3.5 millones de pesos) si los equipos de los verificentros no cumplen con lo establecido.

Martín Gutiérrez Lacayo, coordinador ejecutivo de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe), reconoció que el esquema de verificación vehicular que entra en vigor este viernes es susceptible a la corrupción.

Esto, a pesar de que la norma emergente decretada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales el pasado 7 de junio contempla operativos de revisión y vigilancia por parte de autoridades federales en los verificentros, y que el otorgamiento de hologramas se manejará desde un sistema centralizado, en el que los técnicos de los centros de revisón no intervienen.

“La norma no es 100 por ciento (fiable) porque desafortunadamente siempre va a haber personas que quieran darle la vuelta a la ley”, señaló en entrevista con Pascal Beltrán del Río para

Excélsior TV.

Cuestionado sobre si esta medida ayudará a bajar notablemente los niveles de contaminación en el Valle de México, el funcionario explicó que la norma emergente de verificación es sólo uno de varios lineamientos que se deben implementar para mejorar la calidad del aire.

Adelantó que en una o dos semanas la CAMe dará a conocer otras medidas, que incluirán regulaciones a la industria.